Esta tarta Sacher de naranja es una versión diferente de la famosísima tarta austriaca. La Sacher clásica se prepara con mermelada de albaricoque y lleva como única decoración, su nombre escrito con chocolate.
En otras ocasiones también he probado con mermelada de frambuesa.
La combinación de mermelada de naranja amarga y chocolate negro, hace que no sea apta para todos los públicos. Pero a quienes les gusta, les encanta.
Ingredientes para una tarta Sacher de naranja de 23 cm
Bizcocho de chocolate
- 200 g de chocolate
- 120 g de mantequilla
- 3 cucharadas de zumo de naranja
- 4 huevos
- 120 g de azúcar
- 180 g de harina
- 1 cucharadita de levadura en polvo
Fundir juntos el chocolate y la mantequilla con el zumo de naranja mezclando bien, dejar templar. A continuación, añadir las yemas una a una y la mitad del azúcar.
Montar las claras a punto de nieve con el resto de azúcar, incorporar al chocolate suavemente para que no se bajen.
Añadir la harina tamizada con la levadura en varias veces, con movimientos envolventes.
Forrar con papel vegetal el fondo de un molde desmontable de 23 cm de diámetro y engrasar las paredes. Echar la masa y alisar con una espátula, cocer en el horno precalentado a 180º durante 40 minutos. Pinchar el centro con un palillo para comprobar si está hecho.
Sacar del horno, dejar reposar unos minutos y desmoldar sobre una rejilla, hasta que esté completamente frio.
Cortar en dos discos iguales con un cuchillo de sierra, eliminando la parte abombada.
Relleno
- 150 g de mermelada de naranja amarga
Calentar la mermelada en un cazo de fondo grueso y colar en caliente. Cubrir un bizcocho con la mermelada que no ha pasado por el colador, poner encima el otro apretando un poco.
Calentar otra vez la mermelada colada y repartir por la superficie y los laterales de la tarta, alisando bien. Conservar en el frigorífico mientras se prepara la cubierta.
Cubierta
- 5 hojas de gelatina
- 125 ml de agua
- 100 g de azúcar
- 150 g de chocolate
- 60 ml de nata
Poner en remojo la gelatina en 60 ml de agua fría.
Hervir el agua con el azúcar durante unos minutos, apartar del fuego, añadir la nata y el chocolate picado, mezclar bien hasta que se funda. Por último incorporar la gelatina hidratada con su agua.
Pasar la mezcla por un colador y esperar a que la temperatura baje de 35º, removiendo de vez en cuando.
Sacar la tarta de la nevera y colocar sobre un recipiente de diámetro menor que su base y éste sobre un plato grande.
Repartir la cubierta de chocolate dejando que escurra el sobrante. Esperar un poco y pasar al plato de servir con ayuda de dos espátulas.
Recoger el chocolate que ha caído en el plato y congelar para utilizar en otra receta.
Decoración
- Galletas de mantequilla
Rodear la tarta con galletas pegándolas con un poco de chocolate de la cubierta.