Es la primera vez que preparo pan con masa madre sin nada de levadura, los panes que hago, siempre llevan de las dos. He tenido que hacerlo así ya que la levadura fresca de panadería no se encuentra en los supermercados, al menos desde hace un mes.
Como no estaba segura del resultado, he alimentado mi masa madre durante cuatro días, obteniendo una cantidad importante. Por lo tanto, esta receta de pan con masa madre, puede considerarse un experimento.
Al quinto día, he añadido el resto de ingredientes y he continuado como un pan normal.
Ingredientes para dos panes con masa madre
- 100 g de masa madre
- 600 g de harina de fuerza
- 300 ml de agua
- 100 g de copos de avena triturados
- 9 g de sal
- 1 cucharadita de aceite
- 1 puñado de semillas de lino
En un recipiente amplio con tapa, echar 100 g de masa madre, añadir 2 cucharadas de harina y 2 de agua. Mezclar bien, poner la tapa sin apretar y guardar en el frigorífico.
Los cuatro días siguientes repetir la operación.
El quinto día, pasar al cuenco de la amasadora añadir el resto de agua, de harina, la avena, la sal y el aceite.
Con varios amasados de un minuto y reposo de diez, la masa ha quedado muy blanda pero no me he atrevido a añadir más harina.
Dejar fermentar la masa tapada con un paño limpio durante una hora y amasar ligeramente, dividir por la mitad. Enharinar dos moldes rectangulares y llenar con las dos porciones de masa, dejar subir tapados durante media hora. Cuando hayan subido, repartir las semillas de lino por la superficie, cocer en el horno precalentado a 210º durante 35 minutos. Desmoldar enseguida y poner a enfriar sobre una rejilla para que no se humedezcan.
Para saber si están hechos, golpear la base con los nudillos, si es así, sonará a hueco.