Las magdalenas rellenas o no, son un desayuno y una merienda estupendos, a los niños les encantan, sobre todo si llevan chocolate. Las magdalenas son muy fáciles de hacer y siempre salen bien, sólo hay que respetar las proporciones de los ingredientes.
Ingredientes para una docena y media de magdalenas rellenas
Masa
- 180 g de harina
- 150 g de azúcar
- 3 huevos
- ½ taza de aceite
- 1 cucharada de levadura en polvo
Batir los huevos con el azúcar hasta que aumenten de volumen, añadir el aceite y mezclar suavemente la harina tamizada con la levadura.
Separar las cápsulas de papel de las magdalenas y colocar en los huecos de una bandeja para tartaletas o como yo en moldes de silicona. No es imprescindible pero así no se abren los moldes al cocer y quedan con mejor forma. Repartir la masa con ayuda de una cuchara de helado para dosificar mejor, llegar hasta un dedo del borde para que tengan sitio al crecer.
Relleno de chocolate
- 6 onzas de chocolate
Partir las onzas de chocolate por la mitad y reservar.
Relleno de mermelada de fresa
- 3 porciones individuales de mermelada de fresa
Congelar la mermelada de fresa, sacar en el último momento y dividir en dos.
He rellenado doce magdalenas de chocolate y las seis restantes de mermelada de fresa.
Poner un trozo de chocolate en el centro de cada magdalena y hundir un poco en la masa.
Hacer lo mismo con la mermelada congelada.
Cocer inmediatamente en el horno precalentado a 180º durante unos veinte minutos, hasta que estén doradas. Sacar de los moldes y poner a enfriar en una rejilla. Espolvorear con azúcar glas las magdalenas rellenas de fresa para distinguirlas de las de chocolate. Cuando estén totalmente frías, guardar en un recipiente hermético, se conservan muy bien durante varios días.
mmm… que ricas, solas, y tambien con su relleno