De esta tarta italiana típica de la isla de Capri, se dice, como de otras muchas, que es el resultado de un despiste en la cocina. En este caso, el pastelero olvidó añadir harina al pastel. El resultado es un bizcocho crujiente por fuera y jugoso por dentro con mucho sabor a chocolate.
Ingredientes
- 180 g de almendras molidas
- 20 g de almendras enteras
- 200 g de azúcar
- 200 g de chocolate
- 200 g de mantequilla
- 4 huevos grandes
- 1 cucharada de cacao en polvo
- 1 cucharada de ron
Tostar las almendras en una sartén, moviendo continuamente para que no se quemen. Dejar enfriar completamente y picarlas no muy finas.
Partir el chocolate en trozos pequeños, apartar 20 gramos y fundir el resto con la mantequilla, dejar templar, mientras separar las claras de las yemas. Añadir las yemas una a una al chocolate y la cucharada de ron.
Mezclar la almendra molida con el cacao y la mitad del azúcar. Montar las claras con la otra mitad. Pasar el chocolate a un cuenco grande y añadir primero la almendra molida, a continuación la almendra tostada y los 20 g de chocolate picado, mezclar bien, quedará una pasta espesa. Por último, añadir el merengue poco a poco suavemente con movimientos envolvente, para que no se bajen las claras.
Preparar un molde de forma troncocónica de 24 cm (aluminio) de diámetro. Engrasar con mantequilla, forrar la base con papel vegetal y espolvorear los laterales con azúcar. Echar la masa y alisar la superficie con una espátula. Cocer en el horno precalentado a 170º durante 40 o 50 minutos, al cabo de ese tiempo, pinchar el centro con un palillo para comprobar que está hecho.
Al sacar del horno, esperar unos minutos, pasar un cuchillo de punta redonda por todo el borde y desmoldar sobre una rejilla. Cuando esté completamente frio, pasar al plato de servir y espolvorear con azúcar glas. También se puede decorar con un poco de cacao en polvo y una plantilla.
Para acompañar
- 200 ml de nata para montar
Servir a temperatura ambiente acompañada de nata bien fría ligeramente batida sin azúcar.