Esta tarta de chocolate, es una versión sin gluten de la famosa tarta Sacher. Encontré la receta en unos recortes de una Burda antigua, la conocida revista alemana de patrones. Sustituye la harina por avellanas molidas y añade varias especias, a esto último no me he atrevido, por si no gustaba a los niños. De todas formas, tampoco he seguido la receta al pie de la letra.
Bizcocho
- 180 g. chocolate fondant
- 120 g de avellanas molidas
- 40 g de harina de maiz (Maizena)
- 125 g de mantequilla
- 90 g de azúcar
- 4 huevos
- 1/2 cucharadita de levadura
Tamizar las avellanas con la maizena y la levadura.
Fundir el chocolate con la mantequilla, añadir las yemas y mezclar bien. Incorporar las avellanas.
Montar las claras con el azúcar y añadir a la masa con movimientos envolventes.
Echar en un molde engrasado de 23 centímetros de diámetro, alisar la superficie y cocer en el horno precalentado a 180º durante 40-50 minutos. Pinchar con una brocheta para ver si está hecho.
Volcar sobre una rejilla y dejar enfriar.
Relleno
- 4 cucharadas de mermelada de albaricoque
- 1 cucharada de zumo de limón
Una vez frío el bizcocho, dejar en la misma rejilla. Calentar la mermelada con el zumo de limón, colar y untar la superficie de la tarta con ella. Dejar secar.
Cubierta
- 100 g de chocolate negro
- 100 g de chocolate con leche
- 70 g de mantequilla
Fundir cada chocolate por separado con la mitad de la mantequilla. Cubrir medio círculo del bizcocho con cada chocolate, poniendo un plato bajo la rejilla para recoger lo que caiga. Una vez fría la tarta, pasar al plato de servir.
Decorar la tarta Sacher con unas hojas de chocolate y un poco de cacao en polvo o al gusto de cada cual.
¡Qué preciosidad de tarta!. Ya les gustaría a los del Hotel Sacher tener una así en la carta.
¡Que decoración mas bonita! me encanta, muy elegantona.