Estas magdalenas de cacao soluble son muy esponjosas y tienen un sabor mucho más suave que las de cacao puro. Eso hace que les gusten especialmente a los niños, como he podido comprobar cuando preparé éstas. Además, les encanta encontrarse las gotas de chocolate que llevan en la masa.
La mayoría de los cacaos solubles tienen casi un 80% de azúcar en su composición ,ésto es algo que hay que tener en cuenta para disminuir la cantidad de azúcar de la receta.
Ingredientes para una docena de magdalenas de cacao soluble
- 3 huevos medianos (150 g)
- 170 g de harina de repostería
- 130 g de azúcar
- ½ taza de aceite suave
- 15 g de cacao soluble
- 1 ½ cucharaditas de levadura en polvo
- 50 g de gotas de chocolate
Mezclar y tamizar juntos la harina con la levadura y el cacao, reservar.
Batir los huevos con el azúcar hasta que espesen, incorporar suavemente el aceite y la mezcla anterior de ingredientes secos.
Poner las cápsulas de papel en un molde para tartaletas, llenar con la masa hasta los dos tercios de su capacidad.
El molde de tartaletas es muy útil para que las cápsulas de papel no se abran y deformen al cocer.
Echar una cucharadita de gotas de chocolate en cada magdalena y hundirlas un poco. También pueden mezclarse directamente con la masa pero creo que así quedan mejor repartidas.
Cocer en el horno precalentado a 180º durante 20 o 25 minutos, hasta que se doren.
Sacar del molde y dejar enfriar sobre una rejilla.
Decoración
1 cucharada de azúcar glas
Poner una plantilla encima de cada magdalena y espolvorear con azúcar glas a través de un colador.
El azúcar glas queda más fija si se espolvorea sobre las magdalenas de cacao soluble cuando no se han enfriado todavía.
Son muy apetitosas y las pepitas de chocolate aportan una pequeña alegría añadida.