La receta de esta tarta de invierno es de una de mis cuñadas, está entre sus favoritas aunque hace algún tiempo que no la prepara. Esta vez me he apropiado de ella precisamente para llevarla de postre a su casa.
Es una tarta de bizcocho y frutas de temporada otoño invierno, enriquecida con pasas y frutos secos.
Ingredientes para una tarta de invierno de 24 cm de diámetro
Relleno
- 3 manzanas
- 2 peras
- 1 membrillo
- 50 g de pasas
- zumo de limón
- 30 g de azúcar
- 1 cucharadita de canela
Lavar y pelar las manzanas y las peras y cortarlas en cuartos. Según se van cortando, se echan en un cuenco amplio y se rocían con zumo de limón. El membrillo se corta en trozos mas pequeños, ya que tarda más en hacerse que el resto de la fruta.
Añadir las pasas y la mezcla de azúcar y canela, revolver para que se impregne todo, dejar reposar.
Preparar un molde no desmontable de 24 cm de aluminio o de cerámica resistente al horno, engrasar ligeramente con mantequilla.
Colocar la fruta bien apretada en el molde, procurando no dejar huecos. Cocer en el horno precalentado a 200º sólo por abajo durante 20 minutos.
Mientras tanto preparar la masa del bizcocho.
Bizcocho
- 135 g de harina
- 100 g de azúcar
- 100 ml de aceite
- 1 cucharadita de levadura
- 2 huevos
- 25 g de almendras
- 25 g de avellanas
- 25 g de nueces
Montar los huevos con el azúcar hasta que blanqueen, añadir el aceite y por último la harina tamizada con la levadura.
Sacar el molde del horno y cubrir rápidamente la fruta con la masa, repartir los frutos secos por la superficie. Golpear ligeramente el molde sobre la mesa para que se iguale la superficie.
Bajar la temperatura del horno a 180º y cocer otros 30 minutos.
La tarta de invierno, se sirve en el molde pero si se quiere desmoldar, hay que despegar los bordes del bizcocho cuando aún está caliente.
Menuda pinta rica, y sana, ¡que es todo fruta!
Llevas razón, todo fruta con muy poca azúcar.
Gracias por tu comentario.